Considerada la poetisa del posmodernismo argentino, nació en Sala Capriasca (Suiza), el 29 de mayo de 1892, trasladándose con su familia a Argentina a muy temprana edad.
Creció humildemente, trabajando como lavaplatos, camarera, costurera y obrera.
Se graduó como maestra rural en Coronda, ejerciendo en la Escuela Normal. Fue profesora de arte dramático y colaboró con varios grupos de teatro juvenil.
En 1916 comenzó su carrera literaria con “La inquietud del rosal”, continuándose con las siguientes: en 1918 “El dulce daño”; en 1919 “Irremediablemente”; en 1920 “Languidez”, que recibió el Primer Premio Municipal de Poesía y el Segundo Premio Nacional de Literatura. En 1925, “Ocre”, consagró casi definitivamente su alejamiento del Modernismo, con un contenido realista. En 1926, publicó “Poemas de amor”; en 1927 y 1932 las obras de teatro: “El amor del mundo” y “Dos farsas pirotécnicas”, respectivamente. En 1934 “Mundo de siete pozos”, en 1938 “Antología poética” y en 1968 “Poesías completas”.
Pionera de la liberación femenina en Argentina. En toda su obra se refleja el dramatismo, la lucha social y feminista inusual para su época, así como un carácter singular marcado muchas veces por la neurosis.
Su muerte, continúa la huella de su transgresora personalidad. Su trágico suicidio, en las aguas de la playa “La Perla”, de Mar del Plata, el 25 de octubre de 1938, le permitió huir de una penosa enfermedad oncológica y de la soledad que la invadía.