Benito Pérez Galdós (Las Palmas de Gran Canaria, 10 de mayo de 1843 – Madrid, 4 de enero de 1920) fue uno de los mejores representantes de la novela realista del siglo XIX, además de destacar como cronista. Desde la infancia mostró una gran afición por el dibujo y la creación de piezas dramáticas.
Sus primeros escritos se remontan a su juventud, etapa en la que algunas de sus poesías satíricas, ensayos y cuentos fueron publicados en el periódico local El Ómnibus. Posteriormente, en 1862, se trasladó a Madrid para estudiar Derecho. Aunque su asistencia a clase fue desigual, en esta etapa se comenzó a forjar su extraordinario espíritu literario, fuertemente influido por su presencia asidua en tertulias y conferencias, espacios donde tomó contacto con intelectuales y artistas de la época, desarrollándose su gusto por observar a los demás. También fue en esta ciudad donde pudo vivir de cerca momentos cruciales de la historia de España, como los disturbios de la noche de San Daniel.
En 1865 empezó a colaborar como redactor en el periódico La Nación, escribiendo artículos sobre la vida cotidiana y la actualidad política y social. Asimismo, participó en otras publicaciones como El Debate o la Revista del Movimiento Intelectual de Europa. Viajaría además por Europa como corresponsal de prensa, lo que le permitió conocer corrientes literarias como el realismo y el naturalismo. Estas colaboraciones de prensa decrecerían a partir de 1875, momento en el que se intensificó su producción literaria.
Como prolífico escritor, la obra de Pérez Galdós es extensa y diversa, aunque se caracteriza por reflejar un profundo conocimiento del ser humano y reflexionar sobre la convulsa realidad social. Destacan en su producción literaria novelas como Marianela (1878) o Fortunata y Jacinta (1887), además de su conocida serie Episodios nacionales.
Pérez Galdós fue nombrado académico de la Real Academia en 1897. Sus últimos años estuvieron marcados por la ceguera y las dificultades económicas, falleciendo en 1920 a causa de un ataque de uremia. Fue despedido con un multitudinario homenaje. Habiendo sido nominado al Premio Nobel, es considerado el mayor novelista español después de Cervantes.